¿En qué estaba pensando?

"¿De pirata?, no no, mejor de princesa, aunque... ¿y de vampiresa?... pufff, demasiado.... a ver, pensemos un poco más... ¡de Spiderman!, jajaja, buenoooo... quizás, no se si me atreveré..."

Y ¡zaz! al suelo. El premio a la mejor caida libre en mitad de la calle es para... ¡qué torpe soy!. Pero eso si, en seguida se han acercado 3 personas a ayudarme y levantarme del suelo, preguntándome si estaba bien, y yo dando las gracias muerta de risa, ¡menudo tortazo!. Y es que me he resbalado, no he pisado nada, ni he pisado mal... es de esas veces que te resbalas (serían las suelas de las botas).

Lo que saco de esta historia es que si te caes en la calle (que estaba llena, casi hora punta en una zona peatonal), alguien viene a ayudarte, gente mayor, gente joven... Y cuando ven que estás bien, que te estás partiendo de risa se rien contigo y se marchan moviendo la cabeza como pensando "¡vaya torta!"

Ahora a esperar los moratones...